Delincuentes mantienen en vilo a los vecinos de todo un barrio
Los ataques delictivos sucedieron el sábado y el domingo en Pasaje Artigas. Sospechan que los malhechores andan en automóvil y realizaron trabajos de “inteligencia”. En una casa revolvieron todo. Y en otra hasta supieron cómo desconectar un sistema de alarmas.
El fin de semana dos viviendas del barrio La Rozada, ubicadas en igual cuadra, fueron vulneradas por delincuentes quienes, a decir de la modalidad empleada, habrían realizado “trabajos de inteligencia”. Ante ello, un grupo de vecinos quedó en estado de alerta y, de acuerdo a la versión aportada de parte de uno de ellos a los medios, tenían previsto solicitar mayores medidas de seguridad a la Policía.
De acuerdo a la información conocida por este medio, el sábado una familia estuvo algunas horas ausentes de su domicilio de Pasaje Artigas, arteria ubicada entre las calles Carlos Pellegrini y 25 de Mayo.
Al regresar a la noche, tales personas encontraron una puerta de rejas abierta y una segunda abertura, de madera, dañada a la altura de la cerradura.
Adentro del inmueble observaron un evidente desorden. Los ladrones que ingresaron tuvieron el tiempo necesario para recorrer las diferentes dependencias en búsqueda aparente de dinero, como de otros objetos de valor.
Pese a buscar con insistencia los malvivientes no habrían logrado su objetivo principal. Escaparon de la vivienda sin que nadie los viera.
La Policía acudió tras el llamado de los damnificados. Trascendió que recabaron testimonio del titular de la casa y peritos trabajaron en la búsqueda de rastros.
Por las roturas en una puerta, presuntamente los autores emplearon un objeto contundente, quizá una barreta o bien un destornillador grande.
Pasaron las horas y a pocos metros, también en Pasaje Artigas, volvió a repetirse un caso similar. Intentaron robar en la vivienda de una mujer que había salido el domingo a la mañana.
La vecina regresó muy preocupada cuando se enteró que en su domicilio habían entrado ladrones, luego de trasponer una puerta e inclusive anular un sistema de alarmas que dejaron desparramadas en el piso.
Este segundo golpe delictivo, al parecer, fue desbaratado por otro habitante de la cuadra ya que habría escuchado ruidos extraños y alertó tanto a la propietaria como a la Policía.
Ayer, un efectivo de la fuerza de seguridad estuvo asignado a realizar recorridas a pie en el pasaje, a lo largo de la cuadra. Se trata de una medida, en principio, temporaria.
Se cree que los intentos de robo fueron estudiados, con cierto grado de vigilancia respecto a los movimientos que hicieron los moradores de las viviendas, ya que la precisión en saber que no estaban resulta muy evidente.
Otra sospecha apunta a que los desconocidos utilizaron un automóvil.