Histórico triunfo de Japón frente a Brasil en Tokio
Los «Samuráis Azules» protagonizaron una remontada épica. El resultado marcó un antes y un después en el historial entre ambos países.
Japón obtuvo su primera victoria en la historia contra Brasil. El partido, disputado este lunes 13 en el estadio «Ajinomoto», había comenzado de manera adversa para los nipones, pero lograron remontar un 0 a 2 en contra.
Brasil arrancó el partido con autoridad. Con goles de Paulo Henrique y Gabriel Martinelli, el equipo de Carlo Ancelotti parecía encaminarse a una victoria tranquila. Pero Japón reaccionó con carácter, precisión y velocidad. Takumi Minamino descontó antes del descanso, y ya en el complemento, Keito Nakamura igualó el marcador. La remontada se selló con un certero cabezazo de Ayase Ueda tras un córner, desatando la euforia local.
Este triunfo es mucho más que una anécdota. Japón había enfrentado a Brasil en 13 ocasiones sin poder ganar (con apenas dos empates). La victoria llega en un momento de consolidación para el equipo dirigido por Hajime Moriyasu, que fue el primer país en asegurar su clasificación al Mundial 2026. Será su octava Copa del Mundo consecutiva, y tras su destacada actuación en Qatar 2022 —donde ganó su grupo ante España y eliminó a Alemania—, las expectativas son altas.
En el otro lado, el capitán Casemiro fue claro en su autocrítica: «45 minutos pueden costarte un sueño de la infancia», dijo tras el partido, visiblemente frustrado. Ancelotti, por su parte, tomó el resultado como una señal de advertencia de cara al armado final de la plantilla: «Esta fecha FIFA era de prueba. Tuvimos una buena lección hoy».
El DT italiano también se refirió al futuro de Neymar, quien no jugó por molestias musculares tras una larga recuperación de ligamentos. A sus 33 años y con poco rodaje en Santos, su presencia en el Mundial está en duda: «Neymar puede jugar en este equipo si está en forma. Pero queda poco margen para decidir», advirtió Ancelotti.
Mientras Brasil busca ajustar detalles de cara al próximo Mundial, Japón celebra una noche imborrable que puede marcar el inicio de una nueva era en su historia futbolística.
