“Cultores de un oficio”, homenaje al imaginero Ramón Gregorio Cabrera
El Instituto de Cultura de Corrientes (ICC) invita a la inauguración de la exposición “Cultores de un oficio”, que se realizará el 3 de julio, a las 19 hs., en el Museo de Artesanías Tradicionales, en homenaje al maestro artesano Ramón Gregorio Cabrera.
Por este motivo, este jueves 22 de junio, a las 10 hs, se realizará en el despacho del presidente del Instituto de Cultura, Arq. Gabriel Romero (San Juan 546), una rueda de prensa para brindar detalles sobre la muestra.
Junto al director del Museo de Artesanías, Sergio Cabrera, se dará a conocer el trabajo hecho para esta exposición de obras del maestro Ramón Gregorio Cabrera, y que la misma incluirá la muestra de sus ex alumnos, fotografías de Arón Fisman y un cierre artístico con la presentación del Ballet liderado por Vanesa Obregón, y la actuación de la cantante Lorena Larrea Catterino.
Sobre Cabrera
El maestro artesano nació el 28 de noviembre de 1937 en Derqui, departamento de Empedrado, y fue distinguido en numerosas oportunidades: como «Mejor Artesano de la Argentina y del Año».
El oficio de ebanista y artesano de imaginería, lo aprendió de su abuelo. «Lo mío es herencia genética» decía él, agregando que formaba parte de la tercera generación de artesanos. Tallaba en madera imágenes de vírgenes, Jesucristo, pomberos y de santos populares, venerados en la región.
Se crió entre las maderas. Su hábitat cotidiano fue un aserradero precario y una herrería. Allí, nutrió su espíritu y enriqueció sus manos sabias. Tuvo dos hijos, Sergio y Ramón Alberto. A fines del año 1970, se creó Manos Correntinas, hoy, Museo de Artesanías, del que es fundador.
En su larga trayectoria, obtuvo premios provinciales y nacionales. En el año 1985, la Municipalidad de la Ciudad de Buenos Aires lo distinguió como el Mejor Artesano de Argentina y del año.
En el año 2006, el Fondo Nacional de las Artes, lo distinguió con el Premio a la Trayectoria.
Cabe destacar, además, que su talla de la Virgen de Itatí, se halla en el museo de Arte Sacro del Vaticano.
Merecidos reconocimientos, ha tenido este artesano que hizo docencia, con esmero y paciencia. Su idea era que el arte del tallado trascendiera. Altruismo y devoción por su arte y la cultura de su pueblo, encarnan su prestigio.