Interior

La Justicia paralizó varias obras y protege 72 manzanas de Goya

Una asociación logró una cautelar que frena las obras de construcción en el casco histórico de la ciudad. Denuncian que hay una destrucción indiscriminada del patrimonio. Pero las constructoras se quejan porque se destruye el empleo.

El casco histórico de Goya, en Corrientes, está en medio de un encrucijada judicial. La Asociación Civil Proyecto Goya viene denunciando hace años que el desarrollo inmobiliario indiscriminado está destruyendo el patrimonio cultural de la ciudad. Varios edificios y casas que pertenecieron a personajes o a hechos históricos de relevancia nacional fueron demolido, abandonados o reemplazados por nuevas edificaciones. Ahora, una cautelar frenó todas las obras de construcción que supuestamente infringen la norma de protección de patrimonio.

El problema comenzó con el cambio de mandato en la municipalidad local. El actual intendente, Ignacio Osella, cuando asumió en el 2017, derogó una ordenanza que protegía el casco histórico de la ciudad, que comprende las 72 manzanas comprendidas entre las calles Luis Agote, 9 de Julio, Agustín P. Justo y el río. El argumento que barajó en su momento el jefe municipal era que la norma paraba la construcción, lo que afectaba seriamente la creación de empleo en una localidad que está entre las más pobres del país.

Sin embargo, hay un principio legal en Argentina que dice que una zona protegida ya no se puede desproteger. Es decir, que legislativamente no se puede ir para atrás cuando una ordenanza municipal o nacional considera a un lugar patrimonio histórico o cultural.

Este punto legal fue el resorte que necesitaba la Asociación Civil Proyecto Goya para conseguir una cautelar. De esta forma, según cuenta Indalecio Alvarez, presidente de la asociación, «la ordenanza n° 2018 impulsada por el intendente Osella, que desprotegió el centro fundacional de la segunda ciudad de Corrientes, quedó ahora sin efecto. Y ahora se reconoce la permanente vigencia de la Ordenanza n° 1965 que lo había protegido definitivamente en octubre de 2017».

Esta semana, el juez subrogante a cargo del Juzgado en lo Contencioso Administrativo Federal Nº 1, Enrique Lavié Pico, resolvió «ordenar la suspensión de la Ordenanza Municipal Nº 2018/18, de la ciudad de Goya, hasta tanto se dicte sentencia definitiva en la presente causa».

Alvarez contó que ahora «el intendente deberá ordenar la inmediata clausura de todas las obras en altura superior a siete metros que avanzan en las zonas protegidas y de todas las demoliciones de casas anteriores a 1930. La Comisión Nacional de Monumentos, que renunció a ejercer su tutela preventiva, presionada por el intendente Osella, para permitir la desprotección de un patrimonio nacional, deberá explicarse ante el nuevo ministro de la Cultura de la Nación».

El presidente de la asociación insiste en destacar que el casco histórico de Goya posee «un patrimonio cultural de incalculable valor, testigo de dos siglos de historia argentina: numerosos monumentos del siglo XIX, entre ellos el Teatro más antiguo del país (1873), el Puerto de la Escuadra de la Liga de los Pueblos Libres (1815-1820), los solares de Giuseppe Garibaldi (1842) y Camila O’Gorman (1848), y que fue testigo de los inicios de la Guerra del Paraguay (1865) y de la Conquista del Chaco Austral (1872-1883) sobre los pueblos originarios».

Con respecto al problema del empleo que podría genera esta cautelar, Alvarez sostuvo que esto «sólo afecta al 8% del tejido urbano de la ciudad» y que «el 90% restante de la ciudad está desprotegido y listo para ser desarrollado por la construcción». También aseguró que una protección permanente del casco histórico generaría un desarrollo turístico sin precedentes en el pueblo. «Podría atraer a 100 mil turistas por año», aseguró.

Con esta cautelar, ahora las autoridades municipales deberán frenar las obras en altura y de todas las demoliciones que desfiguran las zonas históricas protegidas, entre ellas la más polémica, que se trata de un edificio de al menos ocho pisos de un empresario de la obra pública de la provincia de Corrientes.

«Esta obra avanza en el histórico solar de la Casa de Amalia Mohando, esposa del gobernador Santiago Baibiene, héroe de la batalla de Ñaembé, en Alvear casi Colón, – y amenaza un predio rodeado de casas históricas como la morada del piloto de Garibaldi Pasquale Lodola – primer presidente del Concejo Municipal de Goya -, la del Comandante de Goya Estanislao Lemos -que detuvo a Camila O’Gorman y a Uladislao Gutiérrez el 14 de junio de 1848-, la del gobernador de Corrientes Gregorio Pampín o las antiguas pulperías de tiempos de Camila: la Casa Canevaro y la Casa Preve, todas aún hoy en pie y situadas a metros de esta obra».

egún la asociación, el Centro Histórico de Goya y su Area de Amortiguación habían sido doblemente protegidos en 2017 en idéntico perímetro: por ordenanza municipal n° 1965/17 y por acta ejecutiva del 19 de noviembre de 2017 de la Comisión Nacional de Monumentos, de Lugares y de Bienes Históricos.

De esta manera, la situación actualmente en Goya es de un freno total en medio de un cruce judicial que afecta tanto a los monumentos históricos como a la creación de empleo.

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