Maduro fue reelecto en una jornada con baja participación y boicot opositor

Con casi seis millones de votos, el actual presidente renovó su mandato hasta 2025 al superar con amplitud a Henri Falcón, su principal adversario. En el marco de una profunda crisis económica, social y política, hubo una baja participación del electorado: apenas el 46% del padrón fue a votar. Boicot de la oposición e indiferencia de la comunidad internacional, las claves de un domingo caliente.

Nicolás Maduro, presidente de Venezuela, logró la reelección hasta 2025 con casi seis millones de votos, pese a la profunda crisis del país y tras unos comicios boicoteados por la oposición y desconocidos por gran parte de la comunidad internacional.

La presidenta del Consejo Nacional Electoral de Venezuela, Tibisay Lucena, anunció que el actual jefe de Estado fue reelegido en su cargo con 5.823.728 de votos.

El principal adversario, Henri Falcón, obtuvo 1.820.552 votos, mientras que el candidato Javier Bertucci logró 925.042 votos y Reinaldo Quijada 34.614.

La votación, para la que fueron llamados 20,5 millones de electores, terminaba a las 18 (hora local), pero centros electorales continuaban abiertos dos horas después, alimentando especulaciones de un acarreo de votos de última hora por parte del gobierno ante una alta abstención.

Durante la jornada, muchos colegios estuvieron semivacíos, con mayor participación en los barrios populares bajo influencia chavista.

Maduro logró renovar su mandato hasta 2025, pese a la creciente presión de Estados Unidos y otros gobiernos que respaldaron el boicot de la oposición y desconocerán los resultados.

Por un lado, Maduro ordenó a su partido facilitar el traslado de votantes a las urnas, en medio de reportes sobre una baja afluencia en las elecciones de este domingo. Mientras que opositores denunciaban que, vencido el plazo de los comicios, varios centros de votación permanecían abiertos y señalaban que era una maniobra del oficialismo.

Un día antes de los comicios, nada hizo ver que el país estaba en víspera de elecciones. Las calles de Caracas y otras ciudades vivieron ayer el ajetreo normal de un sábado en el que todos buscan llevar comida a casa.

Bajo esta apatía, 20,5 millones de los 30,6 millones de venezolanos fueron llamados a elegir, en una sola vuelta, al presidente para un mandato de seis años que iniciará en enero de 2019, dado que los comicios -tradicionalmente en diciembre- fueron adelantados por el oficialismo. Maduro siempre fue favorito, aunque el 75% de los venezolanos rechaza su gestión.

Según analistas, el actual mandatario se beneficia del control social e institucional -incluido el militar-, y la fractura de una oposición cuyos principales líderes y partidos fueron inhabilitados. La coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) rechazó participar en un proceso que tilda de “farsa”, pero el ex chavista Henri Falcón se separó de esa línea.

Durante el gobierno de Maduro, Venezuela cayó en una de sus peores crisis: El FMI estima la contracción económica en 15% y la hiperinflación en 13.800% para 2018. La producción petrolera está en el nivel más bajo en 30 años. Pese a la complicadísima coyuntura, Maduro prometió que hará una “revolución económica”.

“Voy a votar por Nicolás Maduro porque solamente en revolución se pueden mantener los beneficios”, aseguró Nilse González, empleada pública de 55 años, en el centro de Caracas.

En las filas opositoras reinó la división y el desánimo. “Por primera vez en mi vida no voy a votar porque estamos llevando una vida de perros, sin medicamentos, sin comida”, dijo a la agencia de noticias AFP Teresa Paredes, ama de casa de 56 años. Pero Álvaro Toro, jubilado de 64 años, votó porque “esto hay que acabarlo”. Y confiaba en que “Falcón puede traerse chavistas descontentos y opositores”, confió.

El analista Luis Vicente León critica que la MUD llamara a la abstención sin estrategia para el día después. La oposición ya había anunciado desde temprano que, tras los comicios, presionará por “verdaderas elecciones”, pero sin explicar cómo lo logrará. “No va a pasar absolutamente nada, no tengo ninguna expectativa”, dijo a AFP Rafael Rangel, artista de 39 años que emigró a Miami. Cientos de miles han dejado Venezuela durante el gobierno de Maduro.

Bajo el lema “Fuera Maduro”, en un centenar de ciudades del mundo donde viven venezolanos habrá protestas para rechazar los comicios, anunció la MUD.